Tras lograr su primer triunfo hace una semana en Cartagena, Beñat San José quiere estrenar el casillero de victorias en Ipurua. El destino ha querido que el preparador donostiarra se enfrente a dos de los equipos más potentes de la categoría en sus primeros enfrentamientos delante de la afición armera. Hace dos semanas fue el Racing de Santander y ahora llega el turno del Almería. El objetivo no es otro que darle continuidad a las sensaciones del debut y acompañarlo de los tres puntos.
“Ganar en Ipurua es un reto. Nuestra mentalidad tiene que ser ir a por los partidos y en Ipurua, con nuestra gente, hay un sentimiento y un alma especial, tiene que ser un poder añadido para nosotros. Lo más importante es cómo vamos a creer en nosotros y cómo vamos a establecer esa química con la afición para que la victoria se quede en casa”, admitía San José al ser cuestionado sobre la importancia del encuentro de este viernes.
El desafío es doble porque, además, el Eibar tratará de poner fin a casi tres meses sin triunfos como local. No gana en Ipurua desde el 14 de diciembre ante el Real Zaragoza. Demasiado tiempo para un equipo que sumó 23 puntos de 33 posibles en la primera vuelta en su estadio. El calendario ha aumentado su exigencia tras la visita del conjunto maño y no ha sido capaz de vencer a Granada, Albacete, Deportivo y Racing, pese a que en tres de esos cuatro encuentros ha llegado a estar por delante en el marcador.
El descenso está a 6 puntos
Un triunfo contra el Almería sería clave para coger más distancia con los puestos de descenso, que actualmente sigue marcando el Eldense. Los 4 puntos en las dos últimas jornadas han rebajado el pesimismo que se había instalado en Ipurua, pero la alerta sigue siendo máxima y el Eibar necesita mantener las buenas sensaciones de las últimas jornadas para huir de la quema. Ipurua tiene que ser más importante que nunca en esta recta final. San José lo sabe. Y por eso quiere su primera victoria en casa.